Como Siempre...

Una noche más...tan común como siempre...como toda esa eternidad que al volver la vista atrás pareciera un instante, tan largo como una vida. Se despierta de su letargo, observa a su alrededor, el mismo lugar donde siempre ha habitado su medio vivo ser, la vestimenta que por lo regular ha de portar para pasar desapercibido como siempre entre la muchedumbre que a su alrededor deambula, que aunque poca siempre es grato poder disponer de compañía involuntaria. Camina por las calles y el viento suave posa su toque frió sobre su rostro quisiera sentirlo con el cuerpo vivo como en aquellos días en los que la sangre solía fluir por las venas, un paseo por el parque como siempre...a su paso algunas parejas que aprovechan la quietud de la noche y sin darse cuenta la caricia de la luz de la luna quiere acompañarlos sin embargo no logra su cometido, ya que ellos solo prestan atención al otro, a sus caricias físicas a los roses corporales y siseos que sus labios entre si provocan...sigue caminando y en un instante de calma y serenidad se posa en una banca a contemplar a la pálida y hermosa luna, pareciera que se mofara de el con esa sonrisa picara que solo ella puede tener en estas noches...el viento a destiempo obliga a interrumpir la obstinada postura de las hojas que en el piso tienen...levanta un poco el cuello de su abrigo, mas por costumbre que por molestia del frío; es bueno a veces recordar los impulsos a los que el cuerpo reacciona...una mirada mas a la risueña compañera y en su seductora sonrisa arrebata un suspiro del taciturno individuo...

- ¿Donde estas? se pregunta en la mente...

- Junto a ti...como siempre...Una voz calida y dulce le responde. Sin siquiera sorprenderse, algo parecido a un gesto de tranquilidad deja entreverse de la comisura de sus labios y sin intención de voltear a mirar de quien provenía la voz.

- Si, lo se, tu no me abandonas nunca para mi desgracia o placer siempre estas a mi lado, pero no he preguntado por ti y los sabes...

- Si, se que a pesar de que quieras alejarme, no lo logras, pero te aferras a seguir conmigo que mas puedo hacer, sabes también como yo que no la encontraras, no te devolverá tu alma...

- Aahhh!! (suspiro), como siempre...tienes razón, no obstante me sigue intrigando, y aunque le he buscado por siglos no logro encontrarle, no busco mi alma, no espero tenerla de regreso...

- Se la diste, se la obsequiaste en tus arranques de humanidad que todavía insistes en conservar.

- Je je, por que habría de dejarlos si humano fui, Abilasha, que ha sido de ti, donde tus ojos risueños verán?, quizás con alguien que humano será!, o en que lugares inhóspitos deambularas?

- Por que no la dejas partir ya?, no dejes que impida tu felicidad!

- Es que no entiendes, que en mi agonía ella ha podido ayudarme a poder sobrellevar esta maldición que por idiota quise cargar a cuestas!?

- Y tu no te das cuenta de que en siglos no has tenido noticia de ella a pesar de que habitas en el mismo lugar donde se vieron por ultima vez; no te das cuenta que ella puede encontrarte fácilmente y no lo ha echo?

- Siempre pasa lo mismo contigo...y siempre terminamos igual, a veces me inspiras a veces te detesto...por que se que tienes razón. Adoptando una postura pensante se incorpora...

- Me acompañas? pregunta sin voltear...

- Sabes que estaré siempre a tu lado...como siempre...

- Mjuh! si...espero no extrañarte cuando ya no estés conmigo mi querida amiga...SOLEDAD.

Y así continua su camino, pero ahora no seguirá el que conduzca a su hogar, esta noche ha decidió partir en su busca...dispuesto a encontrarle...buscando a esa mujer poseedora de su alma marchita, quien sabe, quizás ahora si pueda tener algo de suerte...